martes, 27 de enero de 2015

FORMA Y DISEÑO. LOUIS KAHN.


Un joven arquitecto me ha formulado esta pregunta: - Sueño con espacios maravillosos, espacios que surgen y se desarrollan fluidamente, sin comienzo ni fin, hechos de un material continuo, blanco y oro. ¿Por qué cuando trazo la primera línea sobre el papel, tratando de fijar el sueño, éste resulta desmerecido?.
Es una pregunta interesante. He aprendido que una buena pregunta tiene más valor que la más brillante de las respuestas. Esta es una pregunta que se relaciona con lo mensurable y lo inconmensurable. La naturaleza - la naturaleza física - es mensurable. Las emociones y la fantasía no tienen medida, no tienen lenguaje, y los sueños de cada uno son distintos. Todo lo que se hace, no obstante, obedece a las leyes de la naturaleza. El hombre es siempre más grande que sus obras porque nunca puede expresar completamente sus aspiraciones. Para expresarse a través de la música o de la arquitectura debe recurrir a medios mensurables como la composición y el diseño. La primera línea sobre el papel es ya una medida de lo que puede ser expresado cabalmente. La primera línea sobre el papel es ya una limitación.
- Entonces – preguntó el joven arquitecto -, ¿Cuál es la disciplina, cuál es el ritual que puede acercarnos a la psique? Porque es en esta aura sin materia ni lenguaje donde siento que el hombre verdaderamente es.
- Vuelva al Sentimiento, aléjese del Pensamiento. En el Sentimiento está la Psique. El Pensamiento es el Sentimiento más la presencia del Orden. El Orden, hacedor de toda existencia, no tiene Voluntad de Ser. Prefiero la palabra Orden en lugar de Conocimiento, porque el conocimiento personal no alcanza a expresar el pensamiento en forma abstracta. Esta Voluntad de Ser está en la Psique. Todo lo que deseamos crear tiene su principio, exclusivamente, en el sentimiento. Esto que es verdad para el científico, lo es igualmente para el artista.
Pero le previne a mi interlocutor que contar solo con el sentimiento e ignorar el Pensamiento significa no realizar.
Dijo el joven arquitecto: - Vivir y no realizar es intolerable. Los sueños llevan implícitos la voluntad de ser y el deseo de expresar esa voluntad. El pensamiento es inseparable del Sentimiento. ¿De qué manera puede entonces el pensamiento entrar a formar parte de la creación, de modo que esta voluntad psíquica pueda ser mas cabalmente expresada? Esta es mi segunda pregunta.
- Cuando el sentir personal se trasciende en la religión (no en una religión, sino en la esencia de la religión) y el Pensamiento nos lleva a la filosofía, la mente se abre hacia la comprensión. Comprensión de la virtual voluntad de ser de, digamos, determinados espacios arquitectónicos. La comprensión es la combinación del Pensamiento y el Sentir en un momento en que la mente se halla en una relación mas estrecha con la Psique, origen de lo que individualiza una existencia. La forma no tiene figura ni dimensión. Por ejemplo, “cuchara” (el concepto de cuchara) caracteriza una forma que posee dos partes inseparables, el mango y el receptáculo cóncavo en tanto que una cuchara implica un diseño específico hecho en plata o madera, grande o pequeña, profunda o no.
La forma es el “que”. El diseño es el “como”. La forma es impersonal, el Diseño pertenece al Diseñador. Diseñar es un acto circunstancial, depende del dinero que se disponga, del sitio, del cliente, de la capacitación. La forma nada tiene que ver con las condiciones circunstanciales. En arquitectura, caracteriza una armonía de espacios adecuada para cierta actividad del hombre.
Reflexione entonces sobre lo que caracteriza en abstracto los conceptos “Casa”, una casa”, o “el hogar”, “casa” es el concepto abstracto de espacios convenientes para vivir en ellos. “Casa” es por lo tanto una forma mental, sin configuración ni dimensión. “Una casa”, en cambio, es una interpretación condicionada de esos espacios. Esto último es diseño. En mi opinión, el valor de un arquitecto depende más de su capacidad para aprehender la idea de “Casa”, que de su habilidad para diseñar “una casa”, que es un acto determinado por las circunstancias. “El hogar” es la casa y los ocupantes. “El hogar” varía de acuerdo con el ocupante.
El cliente para el que se diseña una casa señala al arquitecto las superficies que necesita. El arquitecto crea espacios a partir de estos requerimientos. Una casa creada de esta manera para una familia determinada debe poseer la cualidad de servir también para otra familia. De esta manera el diseño refleja su fidelidad a la forma.
Quiero decir algo más acerca de la diferencia que existe entre forma y diseño, acerca de la concepción, acerca de los aspectos mensurables de nuestro trabajo y de sus limitaciones. Giotto fue un gran pintor. Porque fue un gran artista, pintó cielos diurnos de color negro, pájaros que no podían volar, perros que no podían correr y hombres más altos que las puertas. Un pintor tiene estas prerrogativas. No tiene por qué responder a los problemas de la gravedad, ni considerar las imágenes tales como las conocemos en la vida real. Como pintor, expresa una reacción frente a la naturaleza, y, a través de sus ojos y sus reacciones, nos ilustra acerca de la naturaleza del hombre. El escultor modifica el espacio con objetos que son también expresión de sus reacciones frente a la naturaleza. No crea espacios, los modifica. El arquitecto crea espacios.
La arquitectura tiene limites. Cuando tocamos los invisibles muros de sus límites es cuanto mejor conocemos lo que ellos contienen. Un pintor puede concebir cuadradas las ruedas de un cañón para expresar la futilidad de la guerra. Un escultor puede también modelarlas cuadradas. Pero un arquitecto debe hacerlas redondas. Aunque la pintura y la escultura juegan un hermoso papel en el reino de la arquitectura, así como la arquitectura lo juega en los reinos de la pintura y la escultura, todas ellas se rigen por disciplinas distintas. Puede decirse que la arquitectura es la creación mediata de los espacios. La arquitectura no consiste meramente en cubrir las áreas prescritas por el cliente. Es la creación de espacios que evoquen el sentimiento de su uso adecuado.
Para el compositor, la hoja de música es un registro visible de lo que oye. El proyecto de un edificio debe - del mismo modo - poder leerse como una armonía de espacios iluminados. Cada espacio debe ser definido por su estructura y por el carácter de su iluminación natural. Aún un espacio concebido para permanecer a oscuras debe tener la luz suficiente proveniente de alguna misteriosa abertura que nos muestra cuan oscuro es la realidad. Por supuesto, no hablo de las pequeñas superficies que sirven a los espacios mayores.
Un espacio arquitectónico debe revelar la evidencia de su formación por el espacio en si. No será un espacio cuando se lo modele dentro de una estructura más grande concebida para un espacio mayor, porque la elección de la estructura es sinónimo de la elección de la luz que da forma a ese espacio. La luz de la noche nunca puede igualar a los matices creados por las horas del día y la maravilla de las estaciones.
Un gran edificio debe comenzar con lo inconmensurable; luego someterse a medios mensurables, cuando se halla en la etapa de diseño, y al final debe ser nuevamente inconmensurable. El diseño – hacer cosas – constituye un acto mensurable. En ese momento es como si el diseñador fuera la naturaleza física, misma, ya que en la naturaleza física todo es medible, aún lo que todavía no se ha medido, como sucede en la distancia a las estrellas más lejanas, que algún día, según suponemos, también podremos medir.
Lo que es inconmensurable es el espíritu psíquico. La psique se expresa a través del sentimiento y del pensamiento, y yo creo que siempre permanecerá inconmensurable. Intuyo que la voluntad de ser psíquica invoca a la naturaleza para realizarse en lo que quiere ser. Yo pienso que una rosa quiere ser una rosa. La voluntad de Ser hombre se concreta en la existencia a través de las leyes de la naturaleza y de la evolución. El resultado es siempre inferior al espíritu de ser.
Del mismo modo, un edificio ha de comenzar en un aura inconmensurable y concretarse a través de lo mensurable. Es la única manera en que podemos construir; la única manera de llegar a ser, se concreta a través de lo mensurable. Es necesario respetar las leyes, hasta el final, cuando el edificio pasa a ser algo vivo, evoca cualidades que son, nuevamente, inconmensurables. El diseño, en cuanto implica cantidades de ladrillos, métodos de construcción y de cálculo, ha finalizado; el espíritu de ser del edificio ocupa entonces su lugar.
Me gustaría referirme a una Iglesia Unitaria.
El primer día hablé delante de la congregación utilizando un pizarrón. De las discusiones del ministro con los hombres que lo rodeaban deduje que el aspecto formal, la concepción formal de la actividad unitaria, se basa en la pregunta. La eterna pregunta de por qué sucede todo. Yo tenía que llegar a comprender qué voluntad de ser y qué orden de espacios expresaba la pregunta. Dibujé un diagrama en el pizarrón con la intención de que sirviera como dibujo de la forma de la Iglesia; por supuesto, de ningún modo era un diseño que yo sugería. Dibujé un cuadrado central, dentro del cual coloqué un signo de interrogación. Digamos que ése era el santuario. Lo rodeé de un ambulatorio, destinado a aquellos que no desearan penetrar en el santuario. Alrededor del ambulatorio dibujé un corredor, limitado por el círculo exterior, que contenía el espacio destinado a la escuela. Estaba claro que la escuela, en la que se originaba la pregunta, se convertiría en el muro que la rodeaba. Esto era la expresión de la forma de la Iglesia, no su diseño.
En relación con esto, consideraré por un momento el significado de la Capilla en la Universidad. ¿Radica este significado en los mosaicos, los vidrios de colores, los efectos de agua y otros artificios conocidos? ¿No se trata más bien del lugar de un ritual inspirado que podría expresarse por el gesto de un alumno que para cerca de la Capilla, después que un buen maestro le ha mostrado el verdadero sentido de la dedicación al trabajo? El alumno no siente la necesidad de entrar.
Este lugar, que por el momento no describiré, posee un ambulatorio para el que no desee entrar. El ambulatorio está rodeado a su vez por una galería, para el que no quiera pasar al ambulatorio. La galería da sobre el jardín, para el que prefiera no pasar a la galería. El jardín tiene una pared y el alumno puede hallarse fuera, dirigiéndose a ella con un gesto. Se trata pues de un rito inspirado, no establecido, y es la base de la forma Capilla.
Volvamos a la Iglesia Unitaria. Mi primera solución fue una figura completamente simétrica: un cuadrado. Las cuales formaban la periferia del Edificio, cuyos ángulos estaban ocupados por habitaciones mayores. En el espacio central se situaban el santuario y el ambulatorio. El diseño tenía una disposición muy similar ala del diagrama que había dibujado en el pizarrón. En principio la idea gustó a todos, hasta que los intereses particulares de cada uno de los miembros del comité comenzaron a socavar la rígida geometría en que estaba basada. Pero la premisa original de la escuela alrededor del santuario se mantenía.
Ajustarse a lo circunstancial es justamente el papel que compete al diseño. Durante una discusión. Durante una discusión con los miembros del comité, algunos insistieron en que el santuario debía estar completamente separado de la escuela. Yo lo acepté, provisoriamente, y coloque entonces el auditorium en un lugar aparte y lo conecté con la escuela mediante una pequeña circulación. Pronto se dieron cuenta de que la hora del café, después de la ceremonia, exigía varias habitaciones próximas al santuario, y que al hallarse éstas en un bloque independiente no llegaban a cumplir sus funciones y sería necesario duplicarlas. Además, las aulas, con la separación, perdían el poder de evocar su objeto religioso e intelectual, de modo que volvieron a agruparse alrededor del santuario. El diseño final difiere del primero, pero la forma se mantiene.

ORDEN Y FORMA

El orden es
El diseño es dar forma en el orden
La forma surge de un sistema de construcción
El crecimiento es una construcción
En el orden está la fuerza creadora
En el diseño están los medios dónde con qué cuándo con cuánto
La naturaleza del espacio refleja lo que éste quiere ser
Es el auditorio un Stradivarius
o es un oído
Es el auditorio un instrumento creador
Afinado para Bach o Bartok
ejecutado por el director de orquesta
o es una sala de congresos
Es la naturaleza del espacio está el espíritu y la voluntad de existir de cierta manera
El diseño debe seguir estrechamente esa voluntad
Por lo tanto un caballo pintado a rayas no es una cebra
Una estación de ferrocarril antes que un edificio
quiere ser una calle
surge de las necesidades de la calle
del orden del movimiento
Un encuentro de contornos vidriados
A través de la naturaleza el por qué
A través del orden el qué
A través del diseño el cómo
Una forma surge de los elementos estructurales inherentes a la forma
Una cúpula no ha sido comprendida si surgen preguntas sobre cómo construirla.

Nervi hace crecer un arco
Fuller hace crecer una cúpula
Las composiciones de Mozart son diseños
Son ejercicios de orden – intuitivo-
El diseño incita a más diseños
El diseño deriva sus imágenes del orden
Las imágenes son la memoria – la forma –
El estilo es un orden adoptado
El mismo orden creó al elefante y al hombre
Son diseños diferentes
Nacidos de diferentes aspiraciones
Conformados en diferentes circunstancias
El Orden no implica Belleza
El mismo orden creó al enano y a Adonis
El Diseño no produce Belleza
La Belleza surge de la selección
Afinidades
Integración
Amor
El Arte es una forma que pone vida en el orden – psíquico –
El Orden es intangible
Es un nivel de conciencia creadora
que asciende indefinidamente de nivel


Cuanto más alto el orden mayor es la diversidad en el diseño
El orden sostiene la integración
De lo que es espacio quiere ser lo insólito puede ser revelado al arquitecto
Del orden extraeré fuerza creadora y poder de autocrítica para darle forma a ese insólito
De ahí nacerá la Belleza.